Esta foto la realicé en el año 2003, probando el nuevo mundillo de la fotografía digital. Realmente supuso un gran avance en la concepción del arte de hacer fotografías, por la inmediatez y por las prestaciones que ofrecía el nuevo formato.
Se trata de una imagen del muro oeste de la iglesia, con la puerta principal del templo sobre la cual está situado un gran rosetón y, en la parte superior, la figura de un ángel. En el encuadre incluí los soportales del Ayuntamiento de Balmaseda, contiguos al templo, con sus recias columnas los arcos de medio punto y las vigas de madera que le confieren un sabor especial.
En aquel entonces, todavía estaba la figura del ángel sobre la fachada y no se habían colocado las figuras de forja de los soldados romanos a la entrada de los soportales del Ayuntamiento (Casa de la Villa).